La naviera Norwegian Cruise Line ha realizado una encuesta entre sus pasajeros para conocer las tendencias y los aspectos más valorados de navegar con su compañía.

Según se arroja de este estudio, más del 70 % de los viajeros encuestados por Norwegian Cruise Line (NCL) prefieren escapadas en las que prime la relajación, la espontaneidad y el bienestar por encima de los itinerarios rígidos.

Como resultado de este estudio, la naviera americana redefine su experiencia a bordo y regresa a la flexibilidad como bandera, al descanso y a la personalización como protagonistas de su oferta vacacional en el mar.

Más del 70 % de los viajeros encuestados por Norwegian Cruise Line (NCL) prefieren escapadas en las que prime la relajación, la espontaneidad y el bienestar por encima de itinerarios rígidos. Así se desprende de un estudio llevado a cabo por la naviera americana entre sus pasajeros para ajustar su experiencia de viaje a los deseos y tendencias del mercado actual.

Este proceso de escucha activa ha revelado que la flexibilidad, bandera de la naviera que inventó el Freestyle Cruising, sigue siendo el motor de reserva para los pasajeros que eligen NCL para su descanso vacacional.

Un nuevo paradigma del viaje: menos horarios, más diversión

La cultura del turismo “maratón” está dando paso a un modelo donde el tiempo fluye con tranquilidad, se trata de una tendencia sociológica que coge cada vez más impulso en una sociedad que se está cansando de vivir rápido. NCL ha detectado este cambio:

• El 77 % de los viajeros planea sus vacaciones con más espacio libre y menos compromisos.
• El 52 % valora la libertad frente a las obligaciones.
• El 39 % busca poder moverse “a su ritmo”.
• Y más de la mitad (54 %) considera que los cruceros ofrecen el entorno perfecto para lograr ese equilibrio.

En suma: quienes viajan hoy quieren relajación auténtica, sin estrés, sin relojes que marquen cada minuto y con cierta autonomía a la hora de organizar su tiempo de ocio.

La propuesta de NCL: libertad y bienestar como ejes de marca

Los cruceros de NCL permiten personalizar la experiencia: desde horarios más cómodos hasta paquetes de servicios (comidas, bebidas o wifi) adaptados al ritmo de cada pasajero.

Caribe todo el año

La compañía dispone de 18 barcos operando en la región del Caribe, incluyendo los modelos más recientes como el Norwegian Aqua y el próximo Norwegian Luna. Esto garantiza que el Caribe será el destino estrella para la naviera porque está centrando sus esfuerzos en mejorar su oferta en ese destino.

Norwegian Cruise Line ha anunciado la expansión de su isla privada Great Stirrup Cay, incorporando un nuevo parque acuático con toboganes, zonas familiares y áreas de relax con vistas al mar.

El proyecto incluye también una ampliación de las zonas de playa, nuevos espacios gastronómicos y un entorno natural renovado para que los visitantes disfruten de una experiencia aún más completa entre relax y aventura.

Estas mejoras consolidan a Great Stirrup Cay como uno de los destinos más exclusivos del Caribe para los pasajeros de NCL.

Destinos y exclusividad

NCL integra en sus itinerarios islas privadas como Great Stirrup Cay y Harvest Caye, con playas de categoría, entornos de buceo y experiencias de desconexión total.

Harvest Caye es una isla privada en Belice propiedad de Norwegian Cruise Line (NCL), que sirve como destino para sus cruceros. La isla ofrece una experiencia de resort con servicios como una gran piscina, laguna de agua salada para deportes acuáticos, un muelle para barcos, tiendas de souvenirs y restaurantes, además de atracciones como tirolina y un mirador. La isla fue inaugurada en 2016 y el gobierno de Belice es copropietario de las instalaciones. 

A primera vista, puede parecer una escala más dentro del itinerario, pero quienes la descubren saben que es mucho más que eso. Esta isla privada —a la que solo se puede acceder viajando con NCL— ofrece una experiencia de desconexión total, combinando naturaleza virgen, relax y aventura en un entorno seguro y cuidado al detalle. El barco atraca directamente en el muelle, sin necesidad de traslados, lo que permite al viajero bajar a tierra con total comodidad y dejarse llevar por el ritmo tropical.

A diferencia de otras islas privadas del Caribe, en Harvest Caye la gastronomía y las bebidas no están incluidas en el precio del crucero, ya que los restaurantes y bares son gestionados por locales beliceños, aportando un toque auténtico y cultural a la experiencia. Desde un almuerzo con sabor caribeño hasta un cóctel frente al mar, cada momento se disfruta a su propio ritmo. La isla cuenta además con una amplia oferta de actividades para todos los gustos: un santuario de mariposas, deportes acuáticos, así como excursiones para explorar los manglares o la cercana región de Placencia.

Para quienes buscan intimidad, las cabañas privadas junto a la playa ofrecen el refugio perfecto, con vistas de ensueño y servicios exclusivos. Y si lo que se busca es aventura más tranquila, el snorkel en sus aguas cristalinas permite descubrir mantarrayas, peces tropicales y coloridos fondos marinos sin alejarse demasiado de la orilla.

Bienestar a bordo

Los barcos están diseñados con espacios para el equilibrio y la relajación: spas como el Mandara Spa, zonas tranquilas, diseño ergonómico y actividades de bienestar pensadas para la serenidad.

Recientemente, NCL ha dado a conocer su nuevo concepto de spa flotante (“Floating Spa”) en dos de sus barcos: el Norwegian Viva y el Norwegian Epic. En el Viva, que es uno de los más recientes de la flota, se instala un espacio de bienestar bajo la marca Mandara Spa con características destacadas como: una sauna de carbón vegetal —la primera de su tipo en la industria de los cruceros—, una sala de terapia de sal, un circuito de experiencias térmicas con zonas de calor y frío, y una cascada de dos plantas dentro del spa. Los huéspedes también tendrán acceso a tumbonas calefactadas, una piscina de sal y amplias áreas de relajación con vistas al océano.

Por su parte, el Norwegian Epic ofrece una “Thermal Suite” que incluye baños de vapor, saunas y tumbonas de azulejo caliente que dan al mar. Las sesiones en estas áreas son con acceso limitado para asegurar un ambiente tranquilo y exclusivo, y los pases permiten un acceso ilimitado durante la travesía. Además, el barco cuenta con un gimnasio de última generación —el “Pulse Fitness Centre”— con vistas al mar y clases de bienestar.

En conjunto, esta iniciativa refuerza la estrategia de NCL de poner el bienestar como uno de los pilares de la experiencia de crucero, elevando el spa a un “destino dentro del destino” a bordo del barco.

¿Por qué este es el enfoque adecuado?

• Se adapta al nuevo perfil del viajero contemporáneo: menos “viaje de ver todo” y más “escapada para mí”.
• Los cruceros se transforman en espacios de descanso y descubrimiento a partes iguales.
• Es una oportunidad para la industria turística: destinos, agencias y operadores pueden alinearse con esta tendencia al bienestar.

Consejos para aprovechar al máximo esta propuesta

• Elige itinerarios con días de altamar: permiten desconectar sin la presión de las escalas.
• Revisa los paquetes de servicios antes de embarcar: una buena planificación favorece la relajación.
• Reserva actividades de bienestar (spa, yoga, masajes) con antelación.
• Tómate el tiempo a tu manera: no todo viaje necesita una lista interminable de excursiones.
• Descubre las islas privadas de NCL, verdaderos paraísos para el descanso.

Más libertad y flexibilidad: más NCL

Norwegian Cruise Line está marcando el rumbo hacia un turismo más humano, relajado y consciente. Con su filosofía de libertad, flexibilidad y bienestar, redefine el concepto de crucero moderno, ofreciendo a los viajeros algo más que un itinerario: una experiencia de descanso total en alta mar.